Proyecto de ley en Inglaterra permitiría a los aficionados participar en la gestión cotidiana de los clubes

28 Sep

Proyecto de ley en Inglaterra permitiría a los aficionados participar en la gestión cotidiana de los clubes

Después de que las manifestaciones de aficionados en Inglaterra fueran fundamentales para que la Superliga no se concretara, varias asociaciones de seguidores quieren tener un rol más protagónico en el día a día de los clubes y al parecer cuentan con el apoyo del gobierno.

Después de tres décadas de mercantilización extrema, los aficionados de Inglaterra han regresado con más fuerza tras la pandemia. 

“El Gobierno de Boris Johnson ya se comprometió en las elecciones de 2019 a realizar lo que llama una Revisión de la Gobernanza del Fútbol Conducida por los Aficionados. Fue una respuesta a la preocupación surgida por la desaparición de varios clubes centenarios debido a la mala gestión. La Superliga precipitó que se reactivaran los trabajos y amplió el radio de los cambios”, manifiersta Kevin Miles, el presidente de la Football Supporters Association (FSA), la organización que agrupa a los hinchas de los clubes de fútbol de Inglaterra y Gales.

“El Gobierno”, prosigue el presidente de la FSA, “ha nombrado un panel integrado por seguidores, clubes e instituciones del fútbol, con un presidente que es la diputada Tracey Crouch. El informe que entregaremos al Parlamento en octubre incorpora una propuesta para establecer un organismo regulador independiente. Este organismo pondrá las condiciones en las cuales los clubes deben operar, y expedirá las licencias para competir. Para obtener estas licencias cada club deberá cumplir requisitos como la implicación real y efectiva de los seguidores en la toma de decisiones de la vida cotidiana del club mediante procesos de consulta en cuestiones como la sostenibilidad financiera. Además, pretendemos introducir una acción de oro en cada club. Esta acción será propiedad de las organizaciones de seguidores e implicará un poder de veto en cuestiones como los colores de los uniformes, el nombre del club y las competiciones en las que podría participar. Esta última capacidad se ha añadido ex profeso por la Superliga. Si se lleva adelante tal y como pensamos, los aficionados tendrán poder legal para evitar que un club se embarque en una Superliga”.

El gobierno británico ha reconocido la importancia de los aficionados y los clubes están cimentando relaciones más fuertes con ellos.

El Príncipe William, heredero al trono del Reino Unido, se plantó el jueves pasado en el modesto campo del Dulwich Hamlet, de categoría regional, para cuestionar la gestión de los clubes bajo principios exclusivamente financieros tras la crisis de la Superliga. 

El Duque de Cambridge defendió el papel de los aficionados en el fútbol como parte de su campaña por promover una ley que ampare el derecho de los hinchas a supervisar la gestión de los clubes. El proyecto de ley solo ha sido posible gracias al activismo de cientos de organizaciones de aficionados repartidos entre Inglaterra y Gales.

Sobre este tema, Alberto Colombo, secretario general adjunto de European Leagues, el organismo que engloba a competiciones como la Premier, LaLiga o la Serie A da su opinión.

“Los aficionados de hoy tienen una conciencia mayor de lo que representa el fútbol en sus comunidades. Se están dando cuenta que se puede romper este buen equilibrio que existe ahora entre fútbol internacional y doméstico, cuando la inmensa mayoría de los clubes en Europa solo vive del fútbol doméstico. Cuando los consultan sobre la posibilidad de expandir los partidos de la Champions o celebrar el Mundial cada dos años, han repetido que no necesitan más fútbol sino mejor fútbol. Y mejor futbol solo se obtiene mejorando el equilibrio competitivo de los torneos a través de una redistribución más equitativa y justa de los ingresos entre los clubes y por cierto no añadiendo más fechas a un calendario que está ya muy congestionado.