OMS: “De no erradicar la polio a escala global, podrían producirse hasta 200 mil contagios anuales
• Para evitar brotes de polio se deben mantener al 90% las coberturas de vacunación4.
• En el 2020, se registraron a nivel mundial 1,226 casos (de todos los tipos), un aumento de más del 800% en comparación con los 138 notificados en 20183.
Hace 30 años se registró el último caso de poliomielitis por virus salvaje en las Américas; sin embargo, esta patología sigue siendo una emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII), que se agravó con la interrupción de las campañas de inmunización por la pandemia y que acentuó la caída en las tasas de coberturas de vacunación.
En esa línea, la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha alertado que, de no erradicarse todos los tipos de polio virus lo antes posible, se generarán al menos 200 mil contagios nuevos anuales en los próximos 10 años.
En el marco de la celebración de los 30 años sin Polio en las Américas, que se conmemora cada 24 de octubre, el pediatra inmunólogo Gustavo Lazo, insta a redoblar esfuerzos para lograr la meta de la erradicación global de esta enfermedad incurable, pero prevenible con la vacunación, pues, si bien la poliomielitis se ha reducido en un 99,9% desde 1988, en el 2020, se registraron a nivel mundial 1,226 casos (de todos los tipos), un aumento de más del 800% en comparación con los 138 notificados en 2018.
“Es importante recordar que la lucha por la erradicación de esta enfermedad a escala global ha sido un esfuerzo mundial que debe mantenerse, porque, a pesar de que la enfermedad parezca eliminada o muy lejana, mientras exista un solo caso en cualquier parte del mundo y las vacunas no lleguen a los niños de todos los países, el riesgo persiste”, resaltó el Dr. Lazo.
“No podemos permitir que la pandemia contra la COVID-19 borre todo lo avanzado para alcanzar un mundo libre de polio y de otras patologías ya controladas. Ninguna persona debería sufrir a causa de una enfermedad prevenible por vacunación”, enfatizó el especialista.
Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advierte que, para mantener a las Américas libre de polio, se deben adoptar medidas como aumentar al 90% las tasas de cobertura de la vacunación en los niños, y conservar una vigilancia epidemiológica sostenida para garantizar la detección temprana de cualquier brote en la región2.
Poliomelitis en Guatemala
Según el último informe anual de Polio en Guatemala (2018) publicado en junio 2019 por el departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social6, Guatemala reporta un nivel de cobertura de vacunación nacional de 85%, por lo que existen aún retos en la vacunación para lograr que sea lo suficientemente alta y homogénea para evitar reaparición del virus. Sin embargo, los esfuerzos del país para la erradicación de esta enfermedad han contribuido para que desde 1990, Guatemala se haya declarado libre de poliomielitis.
La poliomielitis afecta sobre todo a los menores de 15 años, y dentro de este grupo, los menores de 5 años son los más vulnerables. Este virus se propaga entre la población no vacunada, y se evita mediante la vacunación. Es una enfermedad vírica altamente infecciosa que puede provocar parálisis irreversible y, en algunos casos, la muerte de niños menores de cinco años, quienes constituyen la población de mayor riesgo de infección.
Cabe mencionar que, el continente americano reportó su último caso causado por el poliovirus salvaje en Perú en 1991 y, en 1994, fue la primera región en recibir la certificación de eliminación del virus. Sin embargo, en 1975, antes de la inmunización masiva y sistemática, casi 6 mil niños de las Américas quedaron paralizados como consecuencia de esta infección2.
Asimismo, el especialista indica que, actualmente, cinco de las seis regiones de la OMS, incluidas las Américas y que representan más del 90% de la población mundial, han sido certificadas como libres de poliomielitis salvaje, solo Pakistán y Afganistán aún registran casos de este tipo del virus.
Datos del Informe Anual de Polio en Guatemala indican que, durante los últimos años, el Ministerio de Salud ha fortalecido el sistema de vigilancia de PFA a través de la capacitación de epidemiólogos de áreas de salud y a nivel hospitalario y, adicionalmente, ha sido implementada la vigilancia ambiental como complementaria, lo que fortalece las capacidades de detección del poliovirus salvaje o VDVP.
Además, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social cuenta con un plan nacional de mitigación de riesgo que toma en cuenta la mejora en coberturas, vigilancia de PFA y contención. Por otra parte, el Plan Nacional de Respuesta ante un evento o brote de polio está actualizado y validado por las áreas de salud.
Hasta el año 2018, Guatemala continuaba siendo un país de alto riesgo con coberturas de vacunación subóptimas y la vigilancia de PFA no cumplía con todos los indicadores requeridos6. Sin embargo, a nivel distrital (áreas) y municipal se ha demostrado un avance significativo. Por eso, es importante que las autoridades continúen reforzando los esfuerzos de mitigación de riesgo, además de fortalecer las acciones dirigidas a la contención y erradicación final de Polio a través de la vigilancia PFA y de campañas de vacunación permanentes que aumenten la cobertura.