Conservación ambiental, pilar del gremio palmicultor en Guatemala
Las motivaciones de la agroindustria de aceite de palma de Guatemala para contribuir en la preservación de los recursos naturales y minimizar impactos ambientales son varias, pero tienen al centro el beneficio social, especialmente, de las poblaciones que se encuentran en zonas adyacentes al cultivo de palma de aceite y plantas de beneficio.
Aunado al beneficio social, numerosas acciones que ayudan a disminuir impactos son también acciones que implican un aumento en la eficiencia, lo que construye un sector más competitivo. Por ello, las metas trazadas en materia ambiental consideran realismo y factibilidad económica para qué, de esa manera, sea posible lograr y mantener el equilibrio entre los tres pilares de la sostenibilidad (económico, social y ambiental) en la producción de aceite de palma en Guatemala.
Avanzando con paso firme
• Al cierre del año 2020, Guatemala es reconocido como el mayor productor de aceite de palma sostenible en Latinoamérica en cuanto a volumen de aceite certificado por la Mesa Redonda sobre el Aceite de Palma Sostenible (RSPO por sus siglas en inglés) con 477 mil toneladas, representando el 54% del volumen total producido. Esto implica que Guatemala aporta el 32% del volumen de aceite de palma certificado como sostenible de la región latinoamericana.
• El Sistema Nacional de Monitoreo para el Desarrollo Sostenible de Aceite de Palma en Guatemala, impulsado por GREPALMA, da seguimiento al compromiso voluntario de CERO DEFORESTACIÓN asumido por el gremio palmicultor guatemalteco. El 80% de las hectáreas de palma de aceite asociadas a GREPALMA se han adherido al Compromiso Voluntario para la Cero Deforestación y se han afianzado alianzas con actores públicos y privados.
Síganos en /GREPALMA www.grepalma.org | “La palmicultura sostenible, nuestro compromiso”
FEBRERO 2021
Algunas de las principales acciones para la conservación ambiental que el gremio palmicultor está implementando en Guatemala son:
El 80% de las plantaciones de palma de aceite en Guatemala, dependen de agua de lluvia; únicamente el 20 % utiliza sistemas eficientes de riego, haciendo uso responsable del recurso hídrico.
La totalidad de plantas de beneficio de socios
de GREPALMA reutilizan las aguas resultantes del proceso industrial de extracción de aceite de palma para fertirriego, proveyendo nutrientes a las plantaciones de palma y evitando el descarte a cuerpos receptores.
El abono orgánico aplicado en plantaciones asociadas a GREPALMA, obtenidos a partir de
los racimos vacíos resultantes de la extracción de aceite de palma, disminuyen el uso de alrededor de 10 mil toneladas métricas de fertilizantes químicos al año.
Se contribuye al mejoramiento físico, químico y biológico del suelo, a través de los nutrientes que proporciona el abono orgánico aplicado en plantaciones de palma de aceite.
Más de 5 mil hectáreas de bosques conservados dentro de fincas de palma de asociados a GREPALMA aportan con la preservación de biodiversidad.
Las zonas ribereñas ubicadas dentro de fincas de palma tienen múltiples beneficios para el ecosistema del área donde se encuentran sembradas, entre ellos: regulan la hidrología del área, conservan el suelo y orillas de los ríos, son hábitat de animales terrestres y acuáticos.
Más del 40% de los socios de GREPALMA cuentan con estudios de biodiversidad; en uno de ellos, se reporta la presencia de más de 56 especies de aves, 16 especies entre anfibios y reptiles, 17 especies de mamíferos que habitan en sus áreas de conservación y 28 especies de flora.
Se han implementado proyectos de protección y conservación de mangle y especies dentro del ecosistema manglar en la región palmera del sur del país.
Estudios de Alto Valor de Conservación han identificado ecosistemas, áreas y especies protegidas, conservados por empresas certificadas bajo estándares internacionales de sostenibilidad.
Con el fin de promover la protección ambiental se han realizado proyectos de conservación, por ejemplo, la preservación de más de 19,000 hectáreas de bosque en la Reserva de la Biosfera Maya.
Se han implementado proyectos de generación de energía a partir de gas metano producido con residuos provenientes de plantas de beneficio.
La medición de huella de carbono del sector refleja que las emisiones de la producción de aceite de palma en Guatemala representan el 0.45% de las emisiones nacionales totales. Aún así, se priorizan acciones para reducir la generación de geis.